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Tenga en cuenta que quizá la mejor forma de disfrutar esta época es tomarse la fiesta con calma y responsabilidad. No coma o tome licor en exceso; duerma y descanse lo suficiente. No hacerlo puede comprometer su estado de salud.


Es posible que a estas alturas usted tenga más de una “rumba” encima y se sienta agotado solo de pensar en las celebraciones que vienen. Este artículo tiene el propósito de ayudarle a evitar, y a sobrellevar, los efectos desagradables del trasnocho, el consumo de licor y el exceso de comida.

Para empezar, recuerde que, si está enfermo y tiene restricciones, recomendaciones médicas o debe tomar medicamentos, no puede darse licencias. No se deje llevar por la euforia de la Navidad y el Año Nuevo, actúe con responsabilidad con su salud.

El doctor Paulo Zambrano, jefe del Servicio de Urgencias de la Clínica Medellín, advierte que consumir más alimentos de lo normal o incrementar la ingesta de los alimentos que son ricos en grasas y en azúcares no es una decisión saludable y responsable con su salud, más si se padece de enfermedades, como la diabetes, hipertensión, dislipidemias o patologías cardiovasculares.

El hecho de que sea diciembre no quiere decir que pueda descuidarse porque no le va a pasar nada. Se debe seguir comiendo de manera moderada y tratar de mantener la dieta.

Otra recomendación que hace nuestro invitado es hidratarse muy bien, sobre todo en las fiestas, “la gente suele tomar licor durante esta época, la invitación es hacerlo sin excesos y combinando el alcohol con abundante líquido, esto evita la deshidratación”, puntualiza nuestro invitado quien indica que también es importante comer cuando se consume licor.

Para la indigestión

Las comidas pesadas, muy seguidas, condimentadas y variadas exponen a cualquiera a padecer una indigestión.

En caso de náusea, distensión, sensación de llenura y dolor, pare de comer por varias horas. Manténgase activo, no se acueste. La posición horizontal aumenta la sensación de llenura y el malestar.

Haga una caminata corta. Si no puede, mantenga el cuerpo derecho (sentado o de pie).

Si los síntomas son leves, podría ayudarse con una solución carbonatada. Si son severos, y van aumentando, consulte con el médico.

Si pasadas varias horas el malestar se acompaña con fiebre, vómito o diarrea, consulte, puede tratarse de una intoxicación.

Descanse bien

La recomendación fundamental es tener un descanso suficiente, duerma al menos ocho horas diarias. Para evitar el enrojecimiento y la hinchazón de los párpados que deja el trasnocho, la primera recomendación es dormir suficiente. Lávelos con agua fría y limpia. Esta cierra los vasos de los ojos y atenúa el color rojo.

Las compresas de agua fría o la aplicación de hielo (nunca directamente sobre la piel) pueden ayudar. El mismo efecto puede lograrse con la manzanilla, el té, la papa y la manzana, machacados y fríos. También se aconseja usar rodajas de pepino cohombro o de calabacín.

Cuidado con la pólvora

Otro aspecto al que hay que prestarle atención es al uso de la pólvora. Este año el aumento de quemados en Medellín ha sido récord. Según detalla el doctor Zambrano hace nueve años que no se tenía un pico tan alto durante las fiestas de Navidad.

“La cantidad de quemados este año con el uso o manipulación de pólvora ha batido récord, en los servicios de urgencias estamos evidenciando esta situación”, puntualiza nuestro invitado.

Antioquia, tristemente tiene una alta cifra de quemados con relación a las demás regiones de Colombia.

En lo que va de diciembre, se han registrado 58 casos de quemados en todo el departamento, una lamentable cifra.

Medellín, con 31 casos, encabeza el listado de municipios con quemados en Antioquia, seguido por Bello que tiene cinco casos. De estos 58 casos, 22 son menores de 18 años.

Solamente el día del juego de la final entre Medellín y Junior, se registraron 10 personas quemadas en las afueras del estadio Atanasio Girardot.

La cifra enciende las alarmas de las autoridades quienes hacen un reiterado llamado a la no utilización de pólvora en estas fechas.

La invitación es entonces a vivir una Navidad y un comienzo de año con responsabilidad y evitando los excesos. Disfrute, pero con medida.


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