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El Laboratorio de Pruebas de Función Pulmonar es un servicio de apoyo diagnóstico de la Clínica Medellín, que siguiendo protocolos y guías internacionales ofrece a sus pacientes exámenes de excelente calidad y confiabilidad, útiles en el diagnóstico y seguimiento de enfermedades que afectan el sistema respiratorio.


Karol Henao, terapeuta respiratoria y coordinadora de este Laboratorio, nos explica que al Laboratorio acuden todos aquellos pacientes remitidos por un médico general, un internista u otros especialistas que requieren, mediante pruebas de función pulmonar, determinar las causas de la disminución de su capacidad respiratoria y las posibles patologías. Las más comunes son EPOC, fibrosis quística, asma, entre otras.

Las pruebas de funcionamiento pulmonar, también llamadas pruebas funcionales respiratorias o pruebas de funcionamiento pulmonar son un grupo de exámenes que evalúan si los pulmones están funcionando bien. Las pruebas examinan:

•    La capacidad de los pulmones (cuánto aire puede contener)
•    Qué tan bien se mueve el aire hacia adentro y afuera de los pulmones
•    Qué tan bien pasa el oxígeno de los pulmones al torrente sanguíneo. Las células de la sangre necesitan oxígeno para crecer y mantenerse sanas

¿Para qué se usan?

Las pruebas de función pulmonar se suelen usar para:
•    Encontrar la causa de problemas respiratorios
•    Diagnosticar y monitorear enfermedades pulmonares crónicas como asma, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y enfisema
•    Comprobar si el tratamiento de una enfermedad pulmonar está dando resultado
•    Comprobar el funcionamiento pulmonar antes de una operación
•    Comprobar si la exposición a sustancias químicas o de otro tipo en el hogar o el lugar de trabajo ha causado daño pulmonar

¿Por qué necesito una prueba de función pulmonar?

Usted podría necesitar esta prueba si:

•    Tiene síntomas de un problema respiratorio, como falta de aire, sibilancias o tos
•    Tiene enfermedad pulmonar crónica
•    Ha estado expuesto al asbesto o a sustancias que causan daño pulmonar
•    Tiene esclerodermia (enfermedad que daña el tejido conjuntivo)
•    Tiene sarcoidosis (enfermedad que causa daño en las células de pulmones hígado y otros órganos)
•    Tiene una infección respiratoria
•    Una radiografía de tórax tuvo un resultado anormal
•    Tiene programada una operación de abdomen o pulmón

En el Laboratorio de pruebas de función pulmonar de la Clínica Medellín se realizan diversos exámenes, no obstante, las pruebas más comunes suelen ser, por ejemplo:

Curva de flujo de volumen simple o espirometría simple: esta mide la capacidad pulmonar en la entrada y la salida del aire, y detecta si hay algo que obstaculice esta función. Se hace de dos maneras: espirometría pre, en estado normal sin haberse inhalado, y posB2, después del uso de los medicamentos. En promedio dura 30 a 45 minutos, siempre que el paciente siga las instrucciones.


Espirometría o curva de flujo volumen simple o pre y post broncodilatador inhalado: Esta prueba permite medir cuánto aire entra y sale de sus pulmones y estimar su tamaño. Es útil para evaluar y hacer seguimiento a pacientes con enfermedades respiratorias o con factor de riesgo de presentarlas. Debe respirar a través de una boquilla con la nariz tapada siguiendo las instrucciones que le brinda un profesional.

Es importante saber que es una prueba de esfuerzo por lo cual requiere de su colaboración, puede ser necesario darle órdenes en tono enérgico y realizar la maniobra varias veces hasta lograr un examen correcto.

Capacidad de difusión con monóxido de carbono: El test de difusión es una prueba funcional respiratoria que intenta aproximarnos al estado del intercambio de gases, con esta prueba se mide la cantidad de monóxido de carbono transferido desde el alvéolo a la sangre, por unidad de tiempo y unidad de presión parcial del monóxido de carbono, concretamente, aporta información acerca de la cuantía de lecho capilar pulmonar que permanece en contacto con los alvéolos ventilados.

Para facilitar su medición, esta prueba se realiza con el monóxido de carbono (CO), ello permite estimar el gradiente de difusión con sólo medir la presión del CO alveolar

Medición de volúmenes pulmonares por pletismografía: esta prueba se puede hacer en dos fases: con el uso del broncodilatador –inhalador– o sin este. Con esta se obtiene información útil sobre las enfermedades que afectan la vía aérea en el paciente. También dura de 30 a 45 minutos.

Medición de resistencias de vía aérea: evalúa la fuerza que tiene el paciente en la inspiración y la exhalación del aire.

Test de caminata de seis minutos: mide la capacidad pulmonar del paciente en un recorrido de seis minutos en una distancia determinada, para ver cómo responden sus pulmones en la cotidianidad.

Todas estas pruebas, según la terapeuta Karol Henao, son sencillas y tan solo se requiere una buena capacidad de entendimiento y de seguir órdenes por parte del paciente, por eso se efectúan desde los nueve años.

Una vez se le realiza la prueba al paciente, los resultados son evaluados por un neumólogo y éste se los entrega al paciente después de elaborada la prueba. El paciente luego lleva el informe y/o los resultados al especialista o médico que se los ordenó.


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