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María Yadira Rojas Hurtado, cumplió hace poco 18 años al frente del área de seguridad y salud en el trabajo. Desde su llegada ha velado de manera irrestricta por el bienestar y seguridad de los empleados y colaboradores en Clínica Medellín.


María Yadira recuerda vivazmente que llegó a la Clínica Medellín hace 18 años, exactamente su incorporación como empleada de la institución fue un 11 de junio de 2005. Su contratación se dio luego de atender una convocatoria y ser seleccionada entre varios aspirantes al cargo. Ella, desde que tiene memoria, ha sido una enamorada del sector salud y sus intríngulis.

Desde su llegada a Clínica Medellín, Yadira es la Jefe de seguridad y salud en el trabajo, un cargo que ha desempeñado con holgura y pasión por casi dos décadas. Pero su camino no ha sido sencillo, desde el mismo momento en que asumió el cargo se vio obligada a retarse tanto personal como profesionalmente.

Un camino lleno de retos

Los retos han pasado desde el actualizarse y formarse académicamente para estar a la altura de la enorme exigencia del cargo, hasta planificar estratégicamente cómo dividir su tiempo entre su familia y el trabajo.

Antes de llegar a Clínica Medellín María Yadira trabajaba para la empresa Friko, y previo a este empleo, había tenido también una incursión laboral en el área de riesgos laborales de la compañía Colpatria. Cuando se le presentó la oportunidad de incorporarse a Clínica Medellín, María Yadira no dudo en dar el sí, pues desde ese momento avizoraba como su sueño de ayudar y servir a los demás se hacía realidad desde una ventana soñada, el sector salud.

“Pese a las dificultades que hemos enfrentado en el tiempo este reto ha sido fascinante. Y esto se debe a que me encanta lo que hago, ya llevo 25 años ejerciendo la seguridad y la salud en el trabajo, entonces cada vez se vuelve más retador para mí poder cerrar mi ciclo laborar de la mejor manera y darle paso a nuevas generaciones que vengan con nuevas ideas y logren aportarlas como yo lo he hecho en todo este tiempo”, destaca nuestra profesional destacada.

María Yadira abre la puerta de su salida pues está a solo cinco años de pensionarse y desde su llegada a la Clínica Medellín su aspiración siempre ha sido terminar su ejercicio profesional como empleada en la misma institución, pues esta le ha brindado buena parte de su crecimiento y realización como persona y profesional. “Me faltan cinco años para jubilarme y mi idea, desde el principio, ha sido terminar acá”, puntualiza.

“Clínica Medellín para mí ha sido una escuela y una gran oportunidad, me ha enseñado mucho. Acá afiancé mi formación profesional, porque además de ser tecnóloga en seguridad y salud ocupacional de base, también me profesionalicé en talento humano y me especialicé en gerencia hospitalaria. Además, soy ingeniera hospitalaria y especialista en seguridad y salud en el trabajo. Digamos que aquí consolidé mi vida profesional y también mi vida personal, porque estando acá me casé, tuve mis hijos y afiancé mi familia algo que celebro y agradezco”, relata Rojas Hurtado.

La familia

En su vida fuera de la institución, María Yadira destaca que cada minuto se lo dedica a su familia, que está conformada por su esposo y sus dos hijos, Mariana de 10 año y Daniel de 13.

“Mis hijos son mi vida entera, son mi motor. En mis tiempos libres lo que yo hago es dedicarme de lleno a estar atenta a todo lo que los niños necesitan. Desde sus estudios hasta las actividades extracurriculares. Me gusta llevarlos y acompañarlos a que practiquen deportes o actividades de esparcimiento. Verlos crecer me llena de alegría, por eso mis ratos libres, fuera de la institución, trato de dedicarlo todo a mi familia, hacer esto lo es todo para mí”, reconoce nuestra invitada.

Una buena relación con todos

En su día a día, María Yadira resalta que por la misma naturaleza de su cargo el relacionarse con todas las personas es casi que una necesidad inherente, pero también por su personalidad, la cual es afable y cercana.

“A mi llegada a la institución éramos unos 300 empleados y hoy ya somos más de 820 más los colaboradores externos, entonces son muchas las personas con las que debo relacionarme y tengo que ver, pues en mis hombros recaen muchas responsabilidades, fuera de velar por el bienestar y seguridad que es como el objeto central”, comenta.

A parte de ser la jefe del área de seguridad y salud en el trabajo, María Yadira tiene roles que son inherentes a su cargo, entre ellos, acompañar el Comité de seguridad y salud en el trabajo, y ser parte en el Comité de convivencia laboral y Comité de emergencias.

El futuro

María Yadira pese a que aun le faltan cinco años para su pensión, desde ya avizora cómo podría ser su futuro. Ella se ve entregada a su vida familiar, dedicando tiempo a labores sociales y porque no, haciendo consultoría en algunos momentos.

“La idea es dedicarme más a hacer labores sociales. Yo soy de un municipio, soy de Concordia, Antioquia, donde me veo ayudando a las personas de avanzada edad en el asilo o en cualquier otro sitio en el que vea la posibilidad aportar”, concluye nuestra invitada, quien destaca además su agradecimiento con la institución por haberle dado la oportunidad de vivir un sueño, un sueño de formación profesional, de crecimiento personal y familiar, pero sobre todo, el sueño de contribuir con su labor a una consigna aun mayor, la de servir y entregarle bienestar a las personas.


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