Violencia de género y la importancia de educar en valores

La violencia de género puede ejercerse de diferentes formas y en varios ámbitos, no solo en el doméstico. La violencia es la expresión extrema del proceso del maltrato y el mayor factor de riesgo es el hecho de ser mujer, tal como indica la psicóloga Marina Sangonzalo Candel, del Hospital Quirónsalud Valencia (España).

Por ello, ayudamos a descubrir algunas de las falsas creencias que todavía existen hoy e indagamos en la importancia de formar en valores básicos desde la escuela para poder establecer relaciones sanas en el futuro.

Violencia de género, más allá del ámbito doméstico

Al contrario de lo que se suele pensar, la violencia de género no se ejerce solo en el ámbito doméstico. La realidad es que se manifiesta en diversos ámbitos y de diferentes maneras, con una mayor o menor visibilidad. Pese a ello, hoy siguen existiendo falsas ideas en torno a la violencia de género que es importante conocer.

Según nos explica Sangonzalo: "Existe una creencia compartida en que el maltrato se sitúa en un estrato social-económico bajo, que es un tema privado que las mujeres consienten e, incluso, provocan con su comportamiento. Por el contrario, es frecuente presentar al maltratador como alguien que no controla su conducta, a menudo bajo el consumo del alcohol y las drogas. Pero lo cierto es que afecta a cualquier clase y cultura, siendo un fenómeno muy transversal".

Además, una mujer puede sufrir a lo largo de su vida varias formas de ejercicio de violencia, que pueden ser física, sexual, emocional e incluso económica. Además, este maltrato no ocurre solo en entornos domésticos, sino que también sucede en ámbitos laborales y sociales. También se debe considerar que puede presentarse en varios niveles de visibilidad, siendo muy explícito o, por el contrario, cuidando que nadie se entere.

En definitiva, la experta apunta que "se trata de un problema de orden público en el cual los estereotipos de género juegan un rol donde puede incluso justificarse la violencia. Y aunque el alcohol puede actuar como un disparador, la causa real es la relación desequilibrada de poder entre maltratador y víctima".

Razones para formar en valores básicos

"En esta doliente realidad social, ya más del 80% de los jóvenes españoles conoce actos de violencia en parejas de su edad, según una investigación del Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud (España), y uno de cada cuatro considera normal la violencia dentro de ese ámbito", añade Sangonzalo. En un estudio más reciente, las cifras no han mejorado en ese último aspecto, ya que ha aumentado el porcentaje de jóvenes varones de 15 a 29 años que opinan que la violencia es algo habitual e inevitable, y que, en poca intensidad, no es un problema.

Pero ¿por qué se observa esta gran cantidad de relaciones de maltrato? Un aspecto significativo, tanto en jóvenes como en adultos, es la falta de formación en los valores básicos para poder vivir sanamente en pareja. "Valores basados en la inteligencia emocional, como la ayuda mutua, la empatía, el respeto, la humildad o la honradez, entre otros", puntualiza la psicóloga Nuria Javaloyes Bernacer, del Hospital Quirónsalud Torrevieja (España).

A menudo, esto abre la puerta a otros valores negativos, tal como advierte la experta: "Estos son, en muchos casos, sustituidos por la posesión, el control, el individualismo y el egoísmo, de forma que las relaciones de pareja se convierten en intentos de hacer que ‘el otro sea como yo quiero que sea’, lo que lleva en la mayoría de las ocasiones al maltrato y la dependencia".

Por estas razones, y para prevenir relaciones malsanas a futuro, Javaloyes destaca la importancia de facilitar una mayor formación en valores básicos y en gestión emocional desde la escuela.

Principales factores desencadenantes

Otro detalle para tener en cuenta son los factores que pueden actuar como desencadenantes principales a sufrir una relación de maltrato como nos avisa la especialista:
• Baja autoestima
• Sentimiento de vergüenza
• Pérdida de identidad psíquica
• Sentimiento de culpa que puede llevar a la víctima a creer que merece ese castigo
• Miedo a las represalias
• Miedo a perder a los hijos

Cabe añadir que las mujeres extranjeras víctimas de violencia de género son más vulnerables, debido a varios posibles factores, como el idioma, la dependencia económica, la falta de redes de apoyo y la propia cultura de su país de origen. Todo ello no solo aumenta su vulnerabilidad, sino que, por ello, también sufren una triple discriminación, como inmigrante, como mujer y como víctima de violencia de género.