La cadera, una articulación clave para la movilidad, puede verse afectada por diversas lesiones que impactan significativamente la calidad de vida. Desde displasia y fracturas hasta pinzamiento y artrosis, entender estas condiciones y sus tratamientos es crucial.
Hoy abordaremos un tema vital para la salud y el bienestar: las lesiones de cadera. Para ello, contamos con un invitado de primer nivel, el doctor José Fernando Gómez Hernández, especialista en ortopedia y traumatología de la Clínica Medellín, quien además es subespecialista en cirugía reconstructiva artroscópica y en el reemplazo articular de la cadera.
El doctor Gómez nos explica que la cadera es la unión entre la parte más superior del fémur (incluyendo el cuello y la cabeza femoral) y la pelvis en una cavidad llamada acetábulo. Esta articulación es esencial para la movilidad y está soportada por la columna, la pared abdominal y otras estructuras circundantes. “Es crucial entender que el dolor en la cadera se localiza principalmente en la región inguinal, no en la parte baja de la espalda o la cintura”, puntualiza nuestro invitado.
Lesiones comunes de la cadera
Según detalla el especialista de Clínica Medellín, las lesiones de cadera pueden ser variadas, pero las más comunes incluyen:
* Displasia del desarrollo de la cadera: Esta condición se origina durante la gestación, cuando el acetábulo no se forma correctamente, causando incompletitud en la articulación. Aunque los ortopedistas infantiles realizan tamizajes para detectar y tratar esta displasia temprano, algunos pacientes llegan a la adolescencia o edad adulta sin saber que la tienen.
* Fracturas: Las fracturas de cadera pueden ocurrir a cualquier edad. Sin embargo, los adultos mayores necesitan menos energía para sufrir una fractura, como caídas de baja altura, mientras que los jóvenes suelen fracturarse por traumas de alta energía, como accidentes de tráfico.
* Pinzamiento Femoroacetabular: Esta condición ocurre cuando se forma hueso anómalo alrededor del cuello del fémur o del acetábulo, causando dolor durante el movimiento.
* Artrosis: Es el desgaste de la cabeza del fémur y el cartílago de la cadera, común en adultos mayores. Cuando el cartílago se desgasta, puede ser necesario reemplazar la cabeza del fémur con una prótesis de cadera para aliviar el dolor y restaurar la función.
Tratamientos para las lesiones de cadera
Consecuente con lo anterior y dependiendo de la lesión, el doctor Gómez explica que los tratamientos pueden variar:
* Displasia del Desarrollo de la Cadera: Se realiza una osteotomía periacetabular, donde se corta y ajusta la pelvis para mejorar el encaje de la cabeza femoral en el acetábulo y así prolongar la vida útil de la articulación sin necesitar un reemplazo temprano.
* Fracturas: Generalmente requieren intervención quirúrgica para estabilizar la cadera y permitir la recuperación.
* Pinzamiento Femoroacetabular: Normalmente es tratado con artroscopias para eliminar el hueso anómalo y mejorar la movilidad de la articulación.
* Artrosis: Se trata con el reemplazo de la articulación deteriorada por una prótesis, permitiendo al paciente recuperar sus actividades diarias sin dolor.
Importancia de las prótesis y cuidados postoperatorios
Según detalla el especialista de Clínica Medellín, el uso de prótesis de cadera es común en adultos mayores con artrosis avanzada para evitar el dolor y la limitación funcional causada por el desgaste de la cabeza del fémur y el cartílago. Sin embargo, en pacientes jóvenes con displasia, se prefiere realizar una osteotomía periacetabular para retrasar la necesidad de una prótesis.
“Es fundamental cuidar bien las prótesis, ya que no duran toda la vida y requieren mantenimiento y cuidado constantes”, destaca el doctor Gómez.
Igualmente, el especialista en ortopedia y traumatología y subespecialista en cirugía reconstructiva artroscópica y en el reemplazo articular de la cadera, explica que cuando un paciente sufre varias fracturas alrededor de la cadera, ya sea en el cuello del fémur, el trocánter o por debajo, la mayoría de estas fracturas requerirán cirugía.
“En pacientes jóvenes, se suelen utilizar clavos y tornillos, mientras que los adultos mayores que sufren fracturas del cuello del fémur a menudo terminan con una prótesis de cadera”, puntualiza Gómez.
Componentes y cuidado de las prótesis
Las prótesis de cadera están compuestas por varias partes, y no todos los pacientes requieren el mismo tipo de prótesis. Generalmente, una prótesis incluye una copa con un recubrimiento especial de hidroxiapatita, aleaciones de metales como titanio y cromo cobalto, y un inserto de polietileno de alto entrecruzamiento que reduce el desgaste. Es esencial que cada prótesis se adapte a las necesidades específicas del paciente.
“Después de una cirugía de prótesis, es importante que el paciente comience a moverse lo antes posible. Aunque la cama puede parecer el lugar más seguro, quedarse inmóvil es perjudicial. La mayoría de los pacientes experimentan una mejora inmediata en el dolor postoperatorio y pueden empezar a sentarse y caminar con la ayuda de un caminador al día siguiente de la cirugía”, enfatiza el doctor José Fernando Gómez.
Estilos de vida y factores de riesgo
Los factores genéticos juegan un papel importante en el desarrollo de patologías de la cadera, como la displasia y la artrosis. “Factores de riesgo incluyen ser el primer hijo, ser mujer y antecedentes de embarazo gemelar o cesárea debido a la posición fetal. Además, el sobrepeso y la obesidad aumentan el riesgo de artrosis y dolor de cadera. La falta de actividad física y el impacto inadecuado también pueden contribuir al deterioro de la cadera. El cigarrillo es otro enemigo que multiplica el riesgo de artrosis y daña el cartílago”, resume nuestro invitado.
Clínica Medellín, un centro de referencia
El conocimiento de las lesiones de cadera y sus tratamientos es fundamental para mantener una buena calidad de vida. El doctor José Fernando Gómez Hernández y su equipo en la Clínica Medellín están equipados con la experiencia y las habilidades necesarias para diagnosticar y tratar estas condiciones, asegurando que los pacientes reciban el mejor cuidado posible.