El cáncer de pulmón: cuando sustancias nocivas llegan y afectan a un órgano vital

Los pulmones son órganos vitales para el funcionamiento de nuestro cuerpo, pues en ellos es donde se presenta el intercambio gaseoso de la sangre, en el cual esta se oxigena y elimina las toxinas que trae luego de su recorrido por los diferentes tejidos. En otras palabras, funge como un filtro de gases específicos que permiten que la oxigenación sanguínea sea la adecuada y favorece la operación del organismo.

Al ser el eje de una red tan grande que desde su ubicación en la caja torácica se conecta con el exterior por las vías respiratorias como la nariz y la tráquea, a ellos ingresan sustancias nocivas y contaminantes que se encuentran esparcidas en el ambiente, como gases, químicos, tabaco, material particulado proveniente de fábricas o automóviles, entre otros, que aumentan el riesgo de contraer ciertas enfermedades respiratorias,como EPOC, fibrosis pulmonar y, entre ellas, el cáncer de pulmón, explica el doctor Daniel Santa, médico especialista en hematología y oncología clínica de la Clínica Medellín.

¿Cómo diferenciarlo de una gripe?

Identificar un cáncer de pulmón tiene cierta complejidad en cuanto a que sus síntomas son muy similares a los de una gripe, ya que ambas producen tos, y esta puede estar acompañada de flema con pintas de sangre.

Una diferencia la marca el hecho de que la tos sea crónica y no mejore aún con el suministro de algún medicamento sugerido por los profesionales de la salud, y que esté asociada a otros síntomas como pérdida de peso, dolor específico en alguna región de los costados, y cuando la enfermedad está en estadios más avanzados ocasiona lesiones de mayor tamaño o liquido en los pulmones o los obstruye, acelerando los síntomas.

Los factores de riesgo

De acuerdo con el doctor Santa, las personas que son fumadoras frecuentes y que llevan varios años consumiendo cigarrillo u otras sustancias tienen una mayor predisposición a generar un cáncer de pulmón.

También están más expuestas aquellas personas que de forma constante inhalan gases o material particulado provenientes de fábricas o automóviles, a sustancias químicas o pinturas en plantas de producción o a humos ocasionados por la quema de leña o de otros elementos, así como por ejemplo la contaminación ambiental.

Avances en el tratamiento

Para determinar el origen de los síntomas y descartar o confirmar la presencia de un cáncer de pulmón, los médicos realizan estudios como radiografías o tomografías en la región del tórax. Cuando se ha constatado que, en efecto, se trata de esta enfermedad, el camino más directo, y la única manera de curarla, es mediante la cirugía, sin embargo, hace poco tiempo se han dado avances clínicos que han encontrado otras soluciones complementarias.
 
Una de ellas, señala el especialista, consiste en inmunoterapia asociada a la quimioterapia convencional, con unos esquemas cortos de tratamiento, para pacientes que no pueden ser operados por estar en estadios III en adelante, cuando la lesión ha infiltrado ciertas estructuras de los bronquios, deteriorando la capacidad y la reserva del pulmón, lo cual hace que no toleren la intervención o que haya un contacto estrecho con sus estructuras vasculares vitales, como la arteria pulmonar y la aorta, generando así un mayor riesgo de mortalidad.

“Esta alternativa se llama quimio-radioterapias definitivas, con la opción de que si en los estudios que hacemos del tumor este presenta una proteína positiva muy fuerte, se le ofrece un manejo por inmunoterapia por un año, posterior al tratamiento, sin necesidad de cirugía. Esto ha aumentado la probabilidad de sobrevida de 35 % a 38 % a cinco años, cuando antes era solo del 10 %”, enfatiza Santa.

Los pacientes que son sometidos a este tratamiento quedan con una buena calidad de vida, sin mayores alteraciones en su función pulmonar y con una compensación ventilatoria del árbol bronquial, brindándoles así una nueva oportunidad vida.