Así funciona la Clínica de Marcapasos de la Clínica Medellín

Los pacientes que tienen instalado un marcapasos para que mediante impulsos eléctricos le ayude a su corazón a mantener un desempeño normal de su frecuencia cardiaca requieren de un seguimiento constante por parte del personal médico para estar al tanto de la operación de este sistema, de modo que se evidencie un impacto positivo en la salud de la persona al tiempo que se presente un correcto funcionamiento del componente técnico.

Para ofrecer un servicio más completo y oportuno, la Clínica Medellín ha habilitado la Clínica de Marcapasos, un área conformada por profesionales de cardiología, hemodinamia, electrofisiología y enfermería en conjunto con representantes de las casas comerciales que fabrican estos dispositivos, para brindarle una atención integral a los pacientes en todos los aspectos relacionados con su salud y con la supervisión de estos equipos, desde su instalación hasta el mantenimiento, el reemplazo de sus baterías y su posible desmontaje según el caso.

Verónica Loaiza, enfermera del servicio de electrofisiología y falla cardíaca de la institución, comenta que esta área especializada realiza un acompañamiento muy pormenorizado del estado de la persona, que de acuerdo con su condición debe acudir cada cuatro, seis o nueve meses, según el dispositivo que se le haya instalado.

Las funciones de la Clínica

Un paciente que visite la Clínica de Marcapasos, en la Clínica Medellín, es atendido en todos los aspectos, comenzando por el estado de la herida que le es causada al momento de instalarle el dispositivo, en especial aquellos que, por la fragilidad de su piel, ya sea por el envejecimiento natural o por alguna otra circunstancia, puedan ser susceptibles de que se origine una infección.

Las revisiones también implican el estado de los cables que van del marcapasos al corazón, incluyendo que estén bien instalados y que estos, en efecto, están conduciendo de forma adecuada el impulso eléctrico que este requiere para mantener su frecuencia cardiaca en los niveles requeridos.

Un análisis necesario es la duración de la batería, un detalle que puede ser revelador respecto al estado del corazón y posibles síntomas que su funcionamiento pueda estar generando.

Las baterías de un marcapaso no se agotan de repente, sino que lo hacen de un modo progresivo y predecible. En las revisiones en la Clínica de Marcapasos, el programador nos indica el estado de la batería y el tiempo de vida útil que le queda. Cuando el dispositivo indica que se está agotando la batería, se indicará revisiones más frecuentes hasta que sea necesario el momento del cambio, ya que las pilas de los marcapasos no son recargables.

¿Quiénes pueden acudir a esta dependencia?

La Clínica de Marcapasos puede ser visitada por los pacientes con marcapasos que sientan palpitaciones, desmayos, dolor en el pecho o mareos que puedan estar asociados al funcionamiento de estos dispositivos.

Esta consulta se debe hacer por urgencias, allí se realiza una valoración por parte del médico general, quien determina si realmente ese síntoma tiene algo que ver con el marcapasos, y en caso tal de que así sea es remitido a la Clínica especializada para confirmar que esta sea la causa o si se debe a otros factores distintos a los del equipo.

Una de las recomendaciones de la enfermera Loaiza es que los pacientes acudan a las revisiones que les son recomendadas en su seguimiento, ya que es importante analizar de forma periódica y en los tiempos previstos el buen funcionamiento del marcapasos.

“Hemos visto pacientes que vienen una vez y no regresan, o lo hacen luego de mucho tiempo, hasta años después, y por tanto el dispositivo no les sigue funcionando correctamente porque la batería se les agota”, explica.

En 2020 se implantaron 259 dispositivos en la Clínica Medellín, y cada semana son atendidos en consulta entre cincuenta y sesenta pacientes en la Clínica de Marcapasos.