Sentir ansiedad de modo ocasional es una parte normal de la vida. Sin embargo, las personas con trastornos de ansiedad con frecuencia tienen preocupaciones y miedos intensos, excesivos y persistentes sobre situaciones diarias. En ese contexto es indispensable consultar al especialista.
Según nos explica María Alejandra Pinilla, psicóloga y magíster en neuropsicología de la Clínica Medellín, con frecuencia en los trastornos de ansiedad se dan episodios repetidos de sentimientos repentinos de ansiedad intensa y miedo o terror que alcanzan un máximo en cuestión de minutos (ataques de pánico).
Igualmente, nuestra invitada puntualiza que estas sensaciones de ansiedad y pánico interfieren con las actividades diarias, son difíciles de controlar, son desproporcionados en comparación con el peligro real y pueden durar un largo tiempo. Con el propósito de prevenir estas sensaciones, puede suceder que las personas busquen evitar ciertos lugares o situaciones. Los síntomas pueden empezar en la infancia o la adolescencia y continuar hasta la edad adulta.
Debemos entender entonces que, como señala nuestra invitada, “la ansiedad es un trastorno, eso significa que hay una cantidad de sintomatología que se reúne para configurarlo como tal”.
Es necesario hacer énfasis entonces en que la ansiedad es un estado prolongado del miedo. El miedo, entre tanto, es una emoción básica que tenemos todos los seres humanos, como la tristeza o la alegría y que es imposible suprimir, porque el miedo nos ayuda a detectar si hay alguna amenaza, para activar todas nuestras alertas de supervivencia.
Pero en la ansiedad ese miedo se convierte en algo en la que el cuerpo y el cerebro empiezan a sentir que actividades comunes y corrientes como ir a trabajar, utilizar el metro o simplemente salir a la calle se convierten en una amenaza.
Síntomas
Nuestra psicóloga invitada explica que la ansiedad se manifiesta a nivel emocional y físico. Es importante, entonces, reconocer ambos tipos de manifestaciones y acudir al médico en cuanto se detectan, ya que una persona con ansiedad que experimente estos síntomas puede considerarlos como signos de una enfermedad grave y, en consecuencia, empeorar en la enfermedad.
Síntomas mentales: preocupación constante, cansancio, irritabilidad, agitación y problemas para concentrarse y conciliar el sueño.
Síntomas físicos: taquicardia, dificultad para respirar, sudoración excesiva, tensión muscular, temblores, mareos, desmayos, indigestión, diarrea y dolor de cabeza.
Causas
Las causas de los trastornos de ansiedad no están del todo claras y en buena parte de los pacientes no llegan a conocerse. En otros casos sí es posible trazar un origen o, al menos, determinar los elementos que precipitan las crisis de ansiedad. Estos son algunos de los factores que pueden influir:
Causas circunstanciales: hechos traumáticos como un accidente de tráfico, un atentado o un incendio pueden provocar ansiedad; en estos casos, esa sensación de ansiedad puede continuar por más que el incidente haya terminado.
Consumo de drogas o alcohol: Las sustancias psicoactivas pueden generar síntomas de ansiedad. Para algunas personas, también la cafeína o la teína pueden producirla.
Experiencias vitales significativas: sin llegar a ser traumáticos, cambios vitales en el presente como un embarazo, o incluso alteraciones en el ámbito laboral (un despido, un ascenso, etcétera) pueden producir ansiedad
Diagnóstico
La psicóloga María Alejandra Pinilla resalta que para evaluar si una persona sufre de trastorno de ansiedad es recomendable que el profesional tratante descarte primero la existencia de una enfermedad sistémica. Para ello, se debe tener en cuenta la evaluación de algunos aspectos como:
• Síntomas físicos que presenta
• Historia médica y psicológica del paciente y de su familia
• Posibilidad de que sufra alguna enfermedad que genere trastorno de ansiedad
“Cuando ya concluimos que la persona está teniendo constantemente en su semana estas conductas ansiosas y eso le produce síntomas físicos, hacemos una serie de cuestionarios para evaluar si el paciente tiene un trastorno de ansiedad o un episodio, pues cuando se está teniendo trastorno de ansiedad es muy común que se pueda empezar a mezclar con síntomas de depresión. Entonces ahí es donde se debe hacerse una muy buena diferenciación en si el paciente padece solo ansiedad o un trastorno mixto de ansiedad y depresión”, puntualiza nuestra invitada.
Tratamientos
El tratamiento para la ansiedad puede realizarse a partir de tratamiento farmacológico y psicoterapia basada en terapia cognitivo conductual.
Tratamiento farmacológico
Se realiza una valoración inicial por medio de la especialidad de psiquiatría para considerar qué medicamentos son pertinentes ya que en cada caso puede variar.
Tratamiento psicológico
Mediante la terapia cognitivo-conductual, el terapeuta acompaña al paciente a generar estrategias para afrontar la sintomatología física y mental, cuestionando sus creencias irracionales y sustituyéndola por pensamientos alternativos que reduzcan la ansiedad.
Recomendaciones
• Pide ayuda. La ansiedad, como muchos otros trastornos mentales, puede ser difícil de manejar sin acompañamiento, recuerda que los especialistas están a tu disposición para ayudar a encontrar el tratamiento adecuado.
• Mantente activo. Participa en actividades que disfrutes y que te hagan sentir bien contigo mismo. Disfruta la interacción social y tus afectos, que pueden aliviar tus preocupaciones.
• Evita el consumo de alcohol o drogas. El consumo de alcohol y drogas puede provocar ansiedad o empeorarla. Si consideras que puedes depender de alguna sustancia psicoactiva, es importante que puedas consultar a un especialista, la idea de dejar de consumir puede hacerte sentir ansioso. Si no puedes dejar de consumir por tu cuenta, consulta con tu médico o busca un grupo de apoyo para que te ayuden.
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