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Te explicamos esta reacción en la piel similar a los habones o las picaduras, cómo se diagnostica y cuáles son los tratamientos disponibles para contrarrestar esta enfermedad.


Aunque en ocasiones llamamos urticaria a cualquier anomalía que aparece en la piel, la urticaria como tal consiste en la aparición de lesiones cutáneas, con relieve y enrojecidas, que causan mucho picor, similar al producido por una picadura. Estos habones se pueden presentar en cualquier parte del cuerpo.

Una de las preguntas más frecuentes es saber si la urticaria crónica es peligrosa. Pues bien, la respuesta es que se trata de una enfermedad benigna, por lo que no entraña riesgos para la salud. Sin embargo, las doctoras Lourdes Arochena Gonzalez y Mar Fernández Nieto, alergólogas del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz (pertenecientes al Grupo Quirónsalud), nos señalan que "altera la rutina y la calidad de vida de los pacientes de una manera importante."

Te contamos todo sobre la urticaria crónica espontánea: su origen, sus principales características, el diagnóstico y el tratamiento.

Qué provoca la urticaria crónica espontánea

Esta enfermedad crónica tiene origen desconocido, a diferencia de otros tipos de urticarias como la generada por frío o presión. En realidad, la urticaria crónica espontánea o idiopática hace referencia a esto en el propio término ‘idiopático’, que significa que no se puede concretar su causa.

Hay que tener en cuenta que la urticaria crónica puede afectar a cualquier franja de edad, tanto a hombres como a mujeres.

Características de la urticaria crónica

¿Cómo son las lesiones? ¿Es benigna o maligna? ¿Se puede transmitir a otras personas? Para conocer más sobre esta enfermedad, las alergólogas nos comentan las particularidades de esta urticaria espontánea, que son:

• Lesiones cutáneas llamadas habones, que son similares a unos granos enrojecidos
• Picor intenso
• Corta duración, que suele estar en torno a 24 horas
• Curso crónico, es decir, que se suelen presentar brotes consecutivos a lo largo de seis o más semanas
• Angioedema en un 50% de los casos. Esto no es sino la manifestación de la urticaria en las mucosas y zonas blandas como la lengua, los labios, los párpados, etc.
• Carácter benigno
• No son infecciosas
• No son contagiosas

Relación entre urticaria y alergia

Parece que no se ha establecido relación alguna entre la aparición de una urticaria crónica y una alergia ambiental, alimentaria o de otro tipo.

Sin embargo, sí es cierto que algunos pacientes que la sufren ven cómo se puede precipitar un brote tras la toma de antiinflamatorios no esteroideos como el ibuprofeno, naproxeno o el Metamizol.

Cómo se diagnostica esta urticaria

Pese a ser una enfermedad de carácter benigno, este tipo de urticaria es capaz de empeorar la calidad de vida. Por tanto, para poder diagnosticarla es muy importante realizar correctamente unos test de calidad de vida, así como un diagnóstico diferencial que descarte otras enfermedades que puedan cursar con estos brotes, como los trastornos tiroideos. "Ante la duda de por qué pica la piel, para un estudio completo y un tratamiento correcto, es importante contactar con la consulta de Alergología", aconsejan las especialistas.

Tratamientos para la urticaria crónica

Lo más habitual es la administración de antihistamínicos de segunda generación como la Bilastina o la Centrizina en dosis altas (hasta cuatro comprimidos diarios) durante períodos largos.

Un segundo paso para los casos que no actuaran con este tratamiento, que puede asociarse también con los corticosteroides, serían las terapias biológicas, como el Omailizumab, que actúa contra la inmunoglobulina E y mejora los síntomas, aunque todavía se desconocen los mecanismos que lo logran.


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