
La enteroscopia de doble balón es una técnica que se utiliza para diagnosticar enfermedades del intestino delgado, un órgano difícil de evaluar debido a su extensa longitud de más de 6 metros. Es el método más reciente, y el primero que logra evaluar la totalidad de este órgano mediante una técnica endoscópica no quirúrgica, con posibilidad terapéutica, sin necesidad de cirugía.
La enteroscopia de doble balón consiste en la introducción de un enteroscopio largo y fino, dotado de un sistema de avance especial, que cuenta con dos balones que se van inflando y desinflando mediante un equipo manométrico que controla la presión de los balones, y que permite el desplazamiento del aparato mientras el intestino delgado se va plegando sobre si mismo.
La gran ventaja que tiene este examen con respecto a otros, como por ejemplo la cápsula endoscópica, es que permite llegar al sitio específico de la lesión y actuar de manera inmediata, bien sea mediante la toma de biopsias, la extirpación de las lesiones o la coagulación de puntos sangrantes.

La enteroscopia de doble balón tiene una duración aproximada de una o dos horas, por lo que se hace con sedación, o incluso con anestesia general. Se puede realizar por vía anterógrada (oral) o retrógrada (anal), o la combinación de ambas.
¿En qué pacientes es útil la enteroscopia de doble balón?
Este procedimiento se practica en personas que presentan alguna de las siguientes situaciones:
- Sangrado gastrointestinal oculto.
- Anemia ferropénica sin causa conocida: disminución del número de glóbulos rojos en la sangre, provocada por la escasez de hierro.

- Sospecha de tumores intestinales.
- Dolor abdominal y pérdida de peso sin causa aparente.
- Enfermedad de Crohn: mal crónico en el cual el sistema inmunitario de la persona ataca su propio intestino, produciendo inflamación.
- Síndrome de mala absorción.
- Vigilancia de lesiones precancerosas.
También es recomendable realizar una enteroscopia de doble balón cuando el diagnóstico no se ha podido confirmar, cuando hay un deterioro clínico del paciente con diagnóstico establecido o cuando no hay respuesta a las medidas terapéuticas.
Este examen también ofrece gran utilidad en la vigilancia de lesiones con conocido potencial premaligno: síndrome Peutz-Jeghers, poliposis adenomatosa familiar y enfermedad celiaca.
¿Qué preparación debe tener el paciente para la realización del procedimiento?
La enteroscopia de doble balón es un procedimiento ambulatorio, pero por realizarse con anestesia general es necesario llevar a cabo los respectivos exámenes con el anestesiólogo varios días antes.

Para la enteroscopia por vía oral el paciente debe tener un ayuno de 6 a 8 horas y para la retrógrada debe preparase desde el día anterior con un purgante, igual que en la preparación de una colonoscopia.
Antes de este procedimiento el paciente debe esclarecer con el médico los siguientes puntos:
- Medicamentos que consume habitualmente, especialmente los anticoagulantes o antiagregantes.
- Posibles alergias a medicamentos o a medios de contrastes.
- Enfermedades crónicas que padece, así como si tiene marcapasos o prótesis cardiaca.
Una vez terminada la prueba el paciente debe seguir en ayunas hasta que se recupere de la anestesia.