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El Coronavirus puede afectar el sistema nervioso central y periférico, produciendo secuelas que se siguen estudiando hasta el momento, sin embargo, no se requiere tener la enfermedad para desarrollar síntomas neurológicos. Aquí le explicamos porqué.



Han transcurrido dos años a partir del momento en que se declaró la emergencia sanitaria en el país como consecuencia del COVID-19; ha sido un período de incertidumbre, estrés, ansiedad y frustración con grandes cambios sociales, económicos y culturales, que ha repercutido en todos los grupos de edad, pero sobre todo en las personas más vulnerables de nuestra sociedad, los niños, los adultos mayores y aquellos con enfermedades crónicas.

Filtrar y procesar esa información cuesta y en ocasiones causa daño colateral incluso sin tener la infección como tal.

Dichos cambios y preocupaciones derivados de la pandemia alteran la salud mental de las personas, lo cual a su vez produce cambios en el cuerpo comprometiendo todos los sistemas incluyendo el inmune, el endocrino, el cardiovascular, el gastrointestinal y por supuesto el mismo sistema nervioso

Complicaciones neurológicas sin tener la infección por Covid-19

El doctor Oscar David Martínez Orozco, neurólogo de la Clínica Medellín, explica que, desde el punto de vista neurológico, se han visto enfrentados a un aumento o empeoramiento de las enfermedades neurológicas, esto se puede explicar por dos motivos.

El primero es que las personas dejaron de consultar por temor a infectarse en los hospitales o tuvieron dificultades para acceder a los servicios de salud y reclamar sus medicamentos de uso crónico, lo cual llevó a que enfermedades de todo tipo tuvieran un control inapropiado

El segundo aspecto es que el confinamiento estricto durante la pandemia, que provocó que las personas tuvieran que aislarse por un tiempo prolongado o pasaran por complicaciones económicas o laborales, hizo que muchas incrementaran sus niveles de ansiedad y depresión, lo cual a su vez empeoró condiciones neurológicas previas como la migraña, el insomnio, los trastornos de déficit de atención/hiperactividad y la epilepsia, peor aún, condiciones neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson parecieron acelerar su curso.

Complicaciones neurológicas relacionados con la infección por Covid-19

Ahora bien, el COVID-19 y la respuesta inmunológica que genera en nuestro cuerpo puede afectar a cualquier sistema incluyendo claro, nuestro sistema nervioso central (cerebro y médula) y el periférico (nervios)  
Esto no es exclusivo del Coronavirus, ya que otros virus como el H1N1, el Dengue, el Zika y el Chikunguña, puede producir afectación similar, pero es claro que nunca se había observado a tal escala.

Se calcula que cerca del 36 % de los pacientes con COVID-19 tienen algún síntoma neurológico, expresa el Dr. Martínez, sin embargo, la gran mayoría no son graves, tales como la pérdida del olfato, el gusto, mareo, el dolor de cabeza y los dolores musculares o mialgias.

Hay otras complicaciones menos frecuentes como la encefalitis, la meningitis, la convulsiones y el aumento de los fenómenos trombóticos generando infartos cerebrales.   

Condiciones como el síndrome de Guillain Barré, la encefalomielitis aguda diseminada y la mielitis, son extremadamente raras

Complicaciones después del COVID-19

Se ha descrito un síndrome ahora llamado “Covid prolongado” o “Long Covid”. El doctor Martínez indica que comprende síntomas poco específicos pero que afectan la calidad de vida del individuo aun sin evidencia de lesión documentable por métodos diagnósticos convencionales.

Estos síntomas comprenden mareo, dolor de cabeza, cambios del estado de ánimo, alteraciones del sueño, sensación de lentitud mental o “embotamiento”, quejas de memoria, falta de atención o concentración, fatiga crónica, poca tolerancia al ejercicio, caída del cabello e inapetencia entre otros. Afortunadamente estos síntomas generales van disminuyendo con el tiempo. No hay un manejo específico para este síndrome, pero su médico le puede ayudar con tratamientos orientados a manejar los síntomas que más le aquejen con la finalidad de causar el menor impacto en su calidad de vida mientras se recupera.

Secuelas como los efectos psicológicos de aquellos quienes sobrevivieron a la enfermedad y los que perdieron a sus seres queridos son de manejo especializado por psiquiatría o psicología y no debe avergonzarle buscar ayuda con respecto a esto y a otras condiciones de su salud mental.   

Las recomendaciones

•    Continuar con los cuidados de pandemia
•    Cuidar la salud mental y acudir a consulta en caso de que exista una sobrecarga de preocupaciones que puedan comprometer el sistema nervioso.
•    Asistir a controles regulares para hacerles seguimiento a patologías que pongan en riesgo la salud y que en la pandemia se puedan descompensar en su manejo, como ansiedad, depresión, diabetes, obesidad, hipertensión, entre otras.
•    Acudir al médico cuando persista alguno de los síntomas de “Covid Prolongado” con la finalidad de recibir el tratamiento y la orientación adecuada.


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