Marta Luz Patiño Muñoz: Un viaje de dedicación y servicio en la Clínica Medellín 

Marta llegó a la clínica en un momento crucial, cuando se estaba conformando el personal para la nueva sede de El Poblado. Inició en el área de sistemas, trabajando en soporte técnico en una época donde los sistemas informáticos eran rudimentarios y demandaban mucho esfuerzo físico, como cargar impresoras y desplazarse con equipos por toda la clínica. A pesar de los retos, Marta sobresalió y, tras una reestructuración, fue reubicada en el área de facturación debido a la percepción de que el rol de soporte técnico demandaba un perfil masculino. Con determinación, ella aceptó el desafío y aprendió sobre facturación, convirtiéndose en una experta y posteriormente avanzando al área de auditoría de cuentas en 2007.
 
En cuanto a su formación, cuando Marta llegó a la Clínica Medellín, ya había estudiado contabilidad y realizado un curso de mantenimiento de equipos, lo que la llevó al área de sistemas inicialmente. Durante su tiempo en la clínica, completó una tecnología en Administración en Servicios de Salud en el SENA y estudió tres semestres de Análisis de Costos y Presupuestos, carrera que dejó en pausa tras el nacimiento de su hija. Su continua formación demuestra su compromiso y adaptabilidad para soportar las funciones que desempeñaba.
 
Experiencia y significado de la Clínica

Para Marta, la Clínica Medellín no es solo un lugar de trabajo, sino su "casa principal". Habla con orgullo de su trayectoria y del apoyo que la clínica ha brindado a su vida personal. A lo largo de los años, la estabilidad laboral en la clínica le ha permitido construir su hogar, adquirir un vehículo y apoyar la educación de su hija, Mariana, quien recientemente se graduó en Administración de Empresas. Marta agradece profundamente a la clínica por todas las oportunidades que le ha brindado y expresa un cariño genuino hacia la institución.
 
Vida personal y aficiones

Marta vive actualmente con su hija de 23 años. Aunque se separó del padre de su hija hace un año, mantiene una relación estrecha con sus hermanas y sobrinos. En su tiempo libre, prefiere la tranquilidad del hogar. Disfruta de la compañía de su perrita Mila y pasa sus días escuchando música, especialmente romántica y de alabanza. Aunque se describe como una persona casera, Marta no duda en aceptar invitaciones para salir, ya sea a una finca o a pasar tiempo con amigos y familiares.
 
Mirando al futuro

A medida que se acerca a la edad de jubilación, Marta se muestra reticente a hacer cuentas exactas de los días que le quedan hasta su pensión. Prefiere disfrutar del presente, aprovechando sus vacaciones para realizar actividades que no puede hacer mientras trabaja. Aunque aún no tiene un plan claro para su vida de pensionada, considera la posibilidad de inscribirse en clases de natación o manualidades o alguna otra actividad que haga más llevadera esa nueva etapa.
 
Vocación y relación con compañeros

Nuestra profesional destacada de este mes cree firmemente en la vocación de servicio, una característica esencial en la Clínica Medellín. Admira profundamente a las enfermeras y al personal médico por su dedicación y sacrificio. A lo largo de su carrera, ha mantenido una relación armoniosa con sus compañeros y jefes, caracterizada por su naturaleza conciliadora y sociable. Marta valora la importancia de una buena relación laboral y se esfuerza por mantener un ambiente de trabajo positivo y sin conflictos.
 
Para concluir, Marta enfatiza su disfrute y sentido de pertenencia en sus funciones dentro de la clínica. Ha navegado por numerosos cambios administrativos y tecnológicos con una mente abierta, siempre dispuesta a aprender y adaptarse a nuevas circunstancias.
 
Marta Luz Patiño Muñoz es, sin duda, un pilar fundamental en la Clínica Medellín. Su dedicación, resiliencia y vocación de servicio la han hecho destacar, convirtiéndola en un ejemplo a seguir para sus colegas y una figura respetada en la institución.